Coronavirus: Párkinson promueve que sus usuarios sigan activos a pesar del confinamiento

  • La entidad mantiene un seguimiento telefónico continuo con sus usuarios para darles apoyo psicológico
  • Cada área -fisitoterapia, logopedia, estimulación cognitiva– plantea tareas pro activas que difunde en sus redes 

La falta de tratamiento durante estas semanas para las personas con dependencias y afectadas por alguna patología repercute de manera negativa en el deterioro de la salud de estas personas. Es el caso de los usuarios de Párkinson Bahía de Cádiz, tanto de la unidad de día como los atendidos en el centro, que permanecen en sus casas sin la atención de los terapeutas. Por ello, desde el principio del confinamiento por el coronavirus la entidad ha preparado diferente material que semanalmente se remite a los usuarios o se sube a las redes sociales para que realicen las tareas en casa y sigan activos. «Depende de cada persona y de cada familia se hacen más o menos», reconoce la directora, Lola Garzón.

«Quienes están en casa de los hijos sí suelen fomentar que se sigan las tareas, pero si son cuidadores mayores es más complicado”, aclara. Cada área –fisioterapia, logopedia, estimulación cognitiva– plantea ejercicios pro activos que se dejan en la web de la entidad, en las redes sociales, por correo electrónico y a los móviles.

Por ejemplo, estimulación cognitiva ha preparado fichas que se descargan y se imprimen para trabajar la memoria, el cálculo, la orientación. La fisioterapeuta graba vídeos semanales con ejercicios de movilidad de diferente tipo, que se difunden en la web o en el perfil de facebook de Párkinson Bahía de Cádiz. La logopeda también está haciendo vídeos, a los que se suman los que profesionales de otras entidades están realizando y de los que también se hacen eco para que puedan aprovecharse los usuarios.

Algo esencial es mantener una rutina, sobre todo en horario: levantarse, almorzar y hacer ejercicio a la misma hora. «Eso evita la desorientación», explica Garzón, que insiste en la importancia para los afectados de párkinson de tener una disciplina para el mantenimiento de las capacidades cognitivas.

Otra cuestión fundamental es la movilidad. «El caminar una hora es fundamental, y de hecho nos preguntaban. Consultamos y con el permiso del médico de atención primaria podían haberlo hecho, aunque entendíamos que no era aconsejable por la exposición, cuando son enfermos crónicos, muchos con pluripatologías», comenta sobre las semanas más estrictas.

PÁRKINSON BAHÍA DE CÁDIZ ATIENDE A PERSONAS DE TODA LA PROVINCIA, TANTO EN CENTRO DE DÍA COMO LOS QUE TRATAN COMO UN SERVICIO DENTRO DE LA ASOCIACIÓN

Con el relajo hace una semana de las condiciones del estado de alarma -por el que tuvieron que cerrar el centro- ya por fin podían salir y con todas las medidas de protección aprovechar para pasear hasta una hora. Y no solo por la actividad física sino por la importancia del sol, que «regula la serotonina, la vitamina D para los huesos». «Las salidas están siendo un alivio» destaca. Eso sí, advierte de que «es lógico que se hayan puesto las franjas horarias para no mezclarnos todos, niños, mayores y vulnerables, y cargarnos lo que hemos hecho ahora”» Por eso sigue defendiendo la necesidad del colectivo de guardar todas las precauciones posibles.

Párkinson realiza, aún cuando sus instalaciones se mantienen cerradas, un seguimiento telefónico continuo. «Preguntamos por el estado de salud en general, pero también estamos ya de apoyo psicológico, porque en las últimas semanas hemos notado que van sufriendo«, señala Garzón. Más desorientados, más bajos de ánimo, y eso repercute de manera negativa, porque se trata de una enfermedad que requiere de ejercicio físico y cognitivo.

Párkinson Bahía de Cádiz atiende a personas de toda la provincia, tanto en centro de día como los que tratan como un servicio dentro de la asociación. De ellos, los que ocupan plazas concertadas son los que han notado peor porque son lo que están en situación de dependencia y por tanto el empeoramiento a nivel cognitivo se nota más.

A pesar de las ganas de reanudar la actividad, la directora entiende que serán uno de los últimos colectivos por su vulnerabilidad. «¿Cómo podríamos mantener la distancia de seguridad en el autobús que traslada a algunos de los usuarios desde las distintas poblaciones?», cuestiona. En todo caso, se plantean llegado el momento volver de manera gradual, poner en marcha servicios mínimos, de administración, para informar a las familias, para atención individual.

Fuente:   Diario de Cádiz