ConTrato Humano- En España existen más de 160.000 personas afectadas y cerca de 30.000 personas sin diagnosticar, de las cuales 1 de cada 5 personas diagnosticadas es menor de 50 años y un tercio del total se encuentran en edad laboral.
La Federación Española de Párkinson junto con las Asociaciones de Castilla la Mancha, Murcia y Andalucía, y con el apoyo de la Fundación ONCE y el Fondo Social Europeo, pone en marcha el proyecto ConTrato Humano. Este proyecto persigue el objetivo de visibilizar, sensibilizar y concienciar a la sociedad en general sobre la enfermedad de Parkinson así como, promover la inclusión laboral y social de las personas afectadas en las zonas de actuación.
El proyecto ConTrato Humano contempla la organización y el desarrollo de acciones de sensibilización en empresas dirigidas a los trabajadores y directivos. Para facilitar la organización de estas sesiones, la Federación Española de Párkinson ha creado una serie de materiales entre los que se encuentran un manual de dinámicas de sensibilización, un cuaderno de historias y un vídeo de sensibilización.
Desde abril a julio las asociaciones de párkinson organizarán acciones de presentación del proyecto y sesiones de sensibilización.
La persona con párkinson en el entorno laboral
El párkinson es una enfermedad muy desconocida por la sociedad alrededor de la cual existen multitud de falsos estereotipos. Esta falta de conocimiento a menudo conduce al estigma y éste puede llegar a provocar el aislamiento social. Aumentar el conocimiento de la EP en el entorno laboral reduce los falsos mitos que puedan rodearla, favoreciendo la normalización de la enfermedad y la inclusión social de las personas con párkinson.
El diagnóstico de párkinson hace que la persona se plantee una serie de cuestiones como si podrá continuar realizando las tareas propias de su puesto, cómo comunicar el diagnóstico e incluso pueden surgir dudas acerca de su continuidad en el puesto de trabajo. La decisión de comunicar el diagnóstico de párkinson en el trabajo es muy personal, pero, en general, abrirse a los demás puede aumentar la red social de apoyo de la persona.
Los síntomas o el efecto de la medicación pueden hacer que en un determinado momento la persona tenga una mayor dificultad para desempeñar las funciones del puesto de trabajo o necesite más tiempo. Comunicar la enfermedad en el trabajo tiene múltiples ventajas. Por un lado, ofrece a los demás la posibilidad de conocer la situación de la persona y empatizar con ella, y por otro permite realizar las adaptaciones necesarias en el puesto.