Con este ejercicio se pretende dotar de musicalidad, la voz del afectado de Parkinson.
La prosodia, favorece la correcta Interpretación de las palabras y del sentido de la comunicación, ya que indica al oyente, la intención comunicativa del emisor (si está preguntando, afirmando, exclamando) y a la vez favorece la comprensión del lenguaje figurativo.